miércoles, 9 de diciembre de 2009
Pensé que por lo menos eso... no me pasaría a mi
Es un ardor tan agudo que seguramente por esta razón se dice que los pecadores arderán en el infierno… realmente eso debe doler!!!!
Les cuento mi historia para que tengan un poco de cuidado y sepan cómo un pequeño descuido puede cambiarles completamente todo.
…Hace unas semanas atrás, mi esposa tuvo que salir como siempre a atender su negocio, y yo, como soy contratista, hay días que me quedo en casa. Esa mañana mi mujer se puso a cocinar una sopa q necesita cocción de 2 horas por lo menos y yo debía apagar la olla cerca del medio día, pero como también me gusta la cocina, me acercaba de rato en rato para ver su sabor y si estaba bien de condimentos y todo eso, y así… entonces cuando ya había transcurrido casi una hora que la sopa estaba hirviendo, me acerqué a la cocina para limpiar un poco lo que había rebalsado en los bordes…
Fue entonces que toqué el borde de la olla sin darme cuenta y como un acto reflejo retiré rápidamente mi mano, y ahí vi de pronto volcarse la olla, entonces para evitarlo traté de agarrarla y pasó lo lógico, me salpicó agua hirviendo como lava, en todo el antebrazo derecho, y como tenía una camisa sin mangas entonces fue horrible la quemadura, sólo atiné a meter mi brazo bajo el grifo de agua fría, vi espantado como se desprendían pedazos de mi piel, mientras pensaba “¡¡¡ahora q mierda hago!!!” saqué mi mano que me ardía como si tuviera fierro caliente, sólo atiné a llamar inmediatamente a un primo mío muy buena gente, es de esos que todo saben, tiene un negocio de alimentos naturales y siempre está investigando sobre la naturaleza y sus milagros.
Bueno, pasaron 5 minutos (los más largos desde que tengo memoria) y tocaron mi puerta, era él, espantado, sólo quería verme el brazo, traía consigo un frasco con una crema, yo de dolor sólo atinaba a quejarme con palabras irrepetibles…
-que mierda es eso? le pregunté…
-vos tranquilo me dijo esto te va a aliviar mientras vamos a un hospital.
-No tengo la llave de la casa, le dije, -no puedo salir y dejar la puerta abierta.
-Veremos qué pasa con esto –me dijo
Bueno, apenas me puso esa pasta sobre la piel en carne viva, sentí un gran alivio.
-Qué es? Le pregunté –está helado!!! –¿qué es?
-Es Jalea Real -me dijo. Debe ser conservada en frío, por eso la tengo así, esta cosa es milagrosa, nunca la probé en quemaduras pero daño no te va a hacer y como está fría por lo menos te va a aliviar el dolor.
-Ufff, estoy mejor!! –le dije. Y ahora? Qué hago?
-Esperemos a ver qué pasa con esta jalea, yo sé que regenera tejidos, no sería raro que sea suficiente y no necesites ir a un hospital…
Bueno, así pasaron los minutos, llegó mi mujer, se espantó al verme, mi primo me dejó todo su frasco de jalea, y decidimos que probaría esto por lo menos un día, ya que en el hospital seguramente me darían otra pomada para quemaduras, pero esto de la jalea me daba tanta frescura que por el momento parecía todo bien.
Bueno, así estuve con la jalea por una semana, fue UN MILAGRO!!! no me quedaron cicatrices horribles típicas de este tipo de quemaduras, mi piel no se encogió, no se deformó, resultó un verdadero milagro. Yo pienso que es como si me hubiese puesto otra piel, mientras se me iba regenerando la que perdí.
No sabemos si este efecto milagroso fue por la inmediatez con la que me puse la jalea real, quizá si dejaba que mi piel se secara, el efecto no habría sido tan bueno, lo único que sé es que bendigo este milagroso alimento y doy gracias a Dios por las maravillas que nos da en la naturaleza.
¿Crema para Párpados?
¡¡¡PENSÉ QUE IBA A QUEDARME CIEGA O POR LO MENOS MARCADA PARA SIEMPRE!!!
Ahora lamentablemente desde entonces no se me borra el color quemado que me dejó ese ácido CARO que me lo vendieron como si fuera “Crema Especial para Párpados”, desde ese día me volví experta en maquillarme, yo que antes no lo hacía con tanta frecuencia, todo por ocultar esa marca horrible que me quedó por confiar en cualquier cosa, revistas basura que venden basura!!!
Entonces me acerqué más al espejo y pude ver que si bien las manchas quemadas continuaban, ya no eran tan oscuras, así que decidí continuar usando jalea. Y así, desde entonces ya no uso con tanta frecuencia las gotas, ya no me molesta estar horas y horas en la computadora, no siento necesidad de descansar la vista ya que no se me irritan los ojos, ya no ando todo el día con los ojos chinos como antes, la molestia que sentía era de todo el día!!! Ahora tengo la sensación de que mis ojos son más fuertes, no sé explicarlo, no siento ese malestar como cuando te entra humo y sobre esas marcas de quemadura ni hablar, se me perdieron completamente.